domingo, 16 de abril de 2017


Sólo quiero pasear con alguien a quien le gusten los cementerios
alguien que no crea que la sola existencia de las sombras puede tapar el sol
alguien que no se espante de los pensamientos oscuros
alguien que sucumba con deleite bajo su propia malignidad

alguien que pueda besar el negro reflejo de mi alma
que tome mi mano bajo el agua
que me encierre por la noche para crear el universo




Fuera de estos sepulcros han pintado un hermoso mural
sonríe a los transeúntes como disimulando la muerte
como quien cantara una nana para el sueño de los inocentes

yo me adentro, sin embargo, como secreta voluntaria de la raza, en la finita realidad de la carne

pero aquí, en soledad, me faltan voces para armar el coro de los desheredados
sé que, más allá, por toda la ciudad
deambulan perdidas las almas gemelas de los fantasmas
sin encontrar palabras para llenar sus tímidas gargantas

Quisiera llegar hasta sus almohadas y susurrar frías esperanzas
historias que destellan y corren a apagarse
que dejan en la piel sensación de vida
y una melancólica felicidad
y cuyo recuerdo basta para encender todas las candelillas
del camino entre el deseo y el invierno.