martes, 31 de diciembre de 2013

La jaula


Un sonoro despertar de fierros quiebra el alba

hay movimiento en la jaula

las fieras alistan sus garras
el suelo tiembla
la agonía ansiosa abre grietas en los barrotes
una batalla se libra en el corazón de la ciudad dormida

una corriente de aire se filtra
las fieras retoman el aliento
el pensamiento se alborota
la fuerza sofocada empuña la daga de la venganza

en el terreno de lo absurdo aún queda espacio para el crimen

sus mentes sin lenguaje, sus rugidos enloquecidos
todo en su ser se impregna de revolución
cuando se liberan las gárgolas oscuras
que escoltarán con ensordecedores quejidos la marcha de los renacidos

los candados se oxidan en segundos y caen 
rindiéndose ante tan soberbia batalla

¡un grito, un salto!

el caos desatado se infiltra en las pesadillas de los ilusos durmientes
la ciudad ya no es hogar para inocentes.

El bautismo de la bruja

Puede oír los aplausos de los alerces
sus sentidos agudizados se transforman con el tiempo en canales eléctricos

Siente la tierra sosteniendo el agua poderosa
siente el agua sosteniendo su cuerpo incandescente

Brota de sus manos la ciencia alquímica
la energía bruta del hombre, hijo de la raza coronada por la Madre
instruida con dolor en el martirio del Padre
flagelada por la historia en su temprana infancia
evocada en secreto por la raíces de los árboles

Hay fiesta entre las bestias sagradas de la tierra
el alma humana despierta
la escencia oculta enmarca el discurso del nuevo tiempo
camino largo que termina
purificación tan inexacta como la Creación
armonía con la imperfección y el error
las bajas pasiones y el conocimiento sublime
es la convergencia recayendo en un aposento de caderas
la belleza del ser que conecta su ombligo con el incendio bajo la tierra
con el núcleo enfurecido que abraza la vida 

Aplauden los elementos ante el levantamiento del Espíritu
la mujer ya no es una corriente de viento que desaparece
es el canal soberbio entre lo invisible y lo concreto
entre el suspiro angélico y el sudor humano
es la consciencia plena del bosque secreto
es el renacer del fuego original 
es el bautismo virginal de las ninfas
es el sacrificio elemental, el suplicio carnal del alma
la enseñanza antigua materializada.

viernes, 13 de diciembre de 2013


Te amo cuando te vas y te quedas como una fotografía en mi cabeza, salvándome del silencio estático de mis pensamientos. Y es que pensar me asesina lentamente los nervios, porque la solución a la vida es inexistente, porque no se encuentra el sentido buscando explicaciones
Pero tú, tú te quedas en tu propia inexistencia, en medio de una jungla de fieras efímeras, sin nada bajo la sábana que encubre el vacío de sus almas. Te quedas como si no fueras a desaparecer o morir jamás, como si hubieras grabado con tu aliento la ventana empañada por la que miro el mundo. Y ansío tu permanencia sobre la tierra como ansío mi presencia ante tu puerta. Nada podría ser eterno, excepto la certeza de amarte como si la baja naturaleza humana no tocara jamás ése rincón de mis sentimientos, ése rincón para venerar tus momentos en silencio, como venero a los santos que rechazan el cielo a cambio de un minuto de rebelión.
Así, mi amor se obsesiona con la perfección de su expresión. Busca gritos que resuenen melódicos en el oído de los dioses a los que encargo tu destino, como una ofrenda colérica de bestialidad femenina. Repito en sus oídos “aléjalo de los sátiros y el terror infrahumano, aléjalo de la soledad y el espanto, de la tristeza acuosa que derrama su lagrimal en las noches largas,  donde no ve ni siente, cuando lo visita la bruma, cuando mi mano no llega a su frente a calmar sus sueños cuando se pueblan de espectros, cuando soy una figura que se desdibuja en su memoria, cuando es irreal hasta la tierra en que se posa”. Ellos me escuchan, conmovidos por la frágil fiereza de mi pasión. Es así como sobrevivo a las horas, es así como sobrevivo en los resbaladizos abismos y el movimiento del péndulo al que se aferra el tiempo.
He vivido otra realidad, viajo entre mundos nocturnos y te llevo conmigo para mostrarte maravillas que la raza humana, en su inconsciencia colectiva, no vislumbra ni en sus pesadillas ni en sus devaneos poéticos. Te llevo conmigo por la línea divisoria entre el cielo y el infierno, por la frontera de la vigilia y el sueño, por el límite entre tenernos y perdernos  a cada instante, en cada parpadear de los siglos, en cada abrazo que compartimos con la eternidad.


jueves, 5 de diciembre de 2013

Puedo



No puedo dormir, me han hecho pensar en él otra vez. Recuerdo estar bajo el agua, o escuchar desde la superficie las súplicas de mi otra yo ahogada por su efecto. Ni yo misma podía recordarla, sonaba en mi cabeza como un eco pasado, como una onda sonora perdida en el espacio-tiempo. Algo, por la noche, ésas noches que no existían para mis pupilas contraídas, me hacía pensar que una parte de mí andaba perdida. Quizás un objeto, un pensamiento, un llanto. Sin embargo, todo parecía estar bien...congelado y distanciado de mi puesto en el mundo.Observaba la vida pasar como viendo un película, riendo de estupideces, viéndome como una idiota.
Dicen que no podré sin él. Faltan aún muchas horas en su oficina para saber de lo que soy capaz. Soy capaz de vivir y ser inmensamente feliz, o de sucumbir aterrada y dolorida, pero en mis propios pies, con un grito salido de mi boca auténtica, engullendo en ése último suspiro a la quemante vida.

lunes, 25 de noviembre de 2013


Soy  brújula descontrolada
he levantado cada lápida buscando sobras de amor entre los muertos
soy urna desolada

Ensayo abrazos y promesas
quejas y charlas de sobremesa
soy fastidio de luna llena
soy amante de ejércitos infernales
soy hembra y cizaña
soy castigo antiguo para la raza humana

Podrido el cuerpo, alzo mis gritos
dicen que soy fantasma hechizando caminos
aterrando viajeros y sus sermones altaneros
mi ansiedad se apodera de sus sueños errantes
y amo en la oscuridad más ciega sus lamentos infantiles

Soy la última hoja de hiedra que ahorca los muros
pegada como una babosa a las piedras de la historia
atravieso en procesión indecorosa por tabernas e iglesias
que son la misma cosa, al fin y al cabo,
la misma cosa sacerdote y tabernero
musa burdelera, religiosa alcahueta

Reclamo cuidados y anocheceres incendiarios
un juramento de juventud y alabanza
que si no viene voluntarioso a acariciar mi falda
arrastraré ensangrentado para oír, entre su llanto,
versos del placer romántico subyugado

soy diosa de nombre censurado
soy el imperio femenino de lo prohibido y clausurado

jueves, 21 de noviembre de 2013



Buscar lo imposible para lograr el mejor posible
Buscar la perfección para que lo imperfecto sea imperecedero
Luchar por la libertad para aceitar las cadenas y hacerlas ligeras
Cantar a la infancia para no sufrir el envejecimiento del alma
Correr tan veloz que la voluntad se despegue de la tierra
Buscar la eternidad
para encontrar a tu lado una dulce muerte


¿Qué es tristeza?
¿Qué es ansiedad?
¿Qué es gritar bajo la tierra?
¿Qué es la raza y la conciencia?

¿Cómo se escuchaba la lluvia pulverizar una tarde desesperante?
¿Cómo era, mientras lo escribías, ver tu mano temblar?

¿Qué sentiste al despertar aquella mañana y verte paralizada
y dejar de sentir el tiempo y constatar que tus cuerdas vocales estaban llenas de cemento?
¿Qué sentiste cuando no pudiste ni llorar
cuando te mirabas pronunciar palabras que no decían nada de ti
ni de tu pánico ni de tu cansancio?

¿Qué es litemia, carboron, dominium, paroxetina'
¿qué gusto te dejan en tu boca al despertar?
¿cuánto te avergonzaste al presentar en l ventanilla tu carnet de salud mental?
¿Cuántos infiernos visitaste antes de volver a despertar?

¿Cómo era que el mundo se deshacía aquella mañana nublada camino a la universidad?
¿Fue como un choque de trenes contra tu cabeza o más bien como capas de realidad desvaneciéndose entre tus dedos?
¿Qué se siente ser granizo cayendo al pavimento y morir lentamente pisoteada por humanos puercos?

¿Qué tan finas eran las pinceladas que daba el sol en sus ojos
cuando se grabó en tu cabeza su mirada eterna
una tarde cualquiera de abril, cuando decidiste amarlo hasta la muerte?

¿Alcanzaste la libertad?
¿Aceptaste al fin las otras espinas?
no puedo darte las mías
Porque aunque tomes mi palabra te será vana, vacía, inútil

Descubre la vida de espaldas a tus espejos
Enciérrate
Llora
Enloquece
Redímete
Ama
Desea
Revuélcate en el barro y lávate en la lluvia
Así quizás puedas, algún día, escribir tus propias líneas
Mirar hacia atrás y, tal como yo lo hago, enorgullecerte de quién eres

miércoles, 27 de febrero de 2013

Juramento



Primero
escuchar aquel salmo de los perros del infierno
lenguas farsantes proclaman el cielo del que son ajenos
Repudiables sabuesos...

Luego ¿contestar con el verso impuesto?
¿regalar la victoria sobre mi juicio y mi cuerpo?

Mi boca se cierra al instante en que hacen silencio para escuchar mi ruego
la pausa que se alarga graba la placa sobre mi entierro

No siento miedo hacia éstas bestias santificadas
No entrego mi alma a sus amenazas

La Tierra me llama a volver a casa,
la verdad la arrastro al patíbulo donde quieren darme caza
que abrace el fuego, dice ése maldito clérigo
pues el fuego es mi elemento
es el agua
la tierra
el viento
y nunca el símbolo de tu maldito imperio

éste es mi juramento




despertar





Yo podría, con tu fuerza, hacer sangrar el alambrado con el filo de mis venas traslúcidas
y beber como alimento cada gota de ése espinoso martirio
castigando el enrejado por dividir el campo que es todo tuyo y de tus pasos

Yo podría, con tu risa, divertir a la muerte y a su corte de navajas
aprisionar el tiempo que amenaza tu existencia diáfana

Podría evangelizar de ateísmo las confesiones de los clérigos
que en inútil sacrificio riegan cada noche los pasillos con rezos para sus amores prohibidos
y soltar de sus cuellos la soga que les vuelve ciegos corderos

Podría barrer los espacios desalojados de la memoria que nos asfixia
de los recuerdos compartidos dónde nos unen soledades y ansiedades
y lejanía de cuerpos
y silencios…
yo, pájaro aplastado
tú, pensamiento saltando barrancos

Podría, con tu letanía, dibujar ensueños
en tus noches y las mías
donde hubiera sólo dicha, euforia, éxtasis
festividad colérica con invitados fantasmas que  nos enseñan danzas extintas
y promesas románticas en el lenguaje subterráneo de los amantes

Yo podría tenerte sin conocerte
Yo podría desearte sin tocarte
y amarte sin poseerte
Podría redimir mi alma de ésta locura que se nos escapa
si tus tristes ojos siguen buscando mi mirada en medio de la vorágine diaria
en la que se recuesta el mundo sobre nuestras espaldas

Amor, tú que detienes el trayecto del sol a la mitad de tu frente
mírame con tu tercer ojo luminoso y dótame del poder del universo
Brujo iniciado por mis antiguas manos en los secretos de la tierra
susurra a mi oído las alabanzas que yo te cantaba
libera mi mente del manto oscuro del olvido
y besa mis labios al caer de las civilizaciones
entonces seré salva
y el fuego que consumió mis pasos y mi canto
será una anécdota antigua y clandestina…
En la mitad de  mi voz dormida guardo la promesa de aquella vida
el juramento, el deseo, el anhelo, el reencuentro…
Y en ésta te juro, te deseo, te anhelo y te encuentro
cada vez que te veo
cada vez que te siento
cada vez que revelo mi despertar al viento…
como ahora que la falsa lucidez me abandona
y la verdadera conciencia gana la guerra declarada por nuestras almas.