miércoles, 4 de agosto de 2010

El Sentido



Nada tuvo sentido...

las notas musicales de color rojo
se fundían en una pared permeable de corazones y labios

las olas de éste mar de algas urbanas nos ahogaron
sumergieron nuestro velero de latas de atún de domingos
y quedamos flotando en la selva submariana
en este cuarto de alquiler que rentamos con el Polo

Fumamos un cigarrillo tendidos en la alfombra de aladino
que a centímetros del suelo nos mecía en el desconcierto
y escuchamos en silencio los nuevos ecos que adornan nuestro tiempo.

"Nada tiene sentido" reí
"Sí, al fin la Nada tiene un sentido" sentenció

Y todo se volvió correcto.